" --¡Qué sensación más extraña! --dijo Alicia--. Me debo estar encogiendo como un telescopio.Y así era, en efecto: ahora medía sólo veinticinco centímetros, y su cara se iluminó de alegría al pensar que tenía la talla adecuada para pasar por la puertecita y meterse en el maravilloso jardín. Primero, no obstante, esperó unos minutos para ver si seguía todavía disminuyendo de tamaño, y esta posibilidad la puso un poco nerviosa. «No vaya consumirme del todo, como una vela», se dijo para sus adentros. «¿Qué sería de mí entonces?» E intentó imaginar qué ocurría con la llama de una vela, cuando la vela estaba apagada, pues no podía recordar haber visto nunca una cosa así. (...)
Mientras decía estas palabras, le resbaló un pie, y un segundo más tarde, ¡chap!, estaba hundida hasta el cuello en agua salada. Lo primero que se le ocurrió fue que se había caído de alguna manera en el mar. «Y en este caso podré volver a casa en tren», se dijo para sí. (Alicia había ido a la playa una sola vez en su vida, y había llegado a la conclusión general de que, fuera uno a donde fuera, la costa inglesa estaba siempre llena de casetas de baño, niños jugando con palas en la arena, después una hilera de casas y detrás una estación de ferrocarril.) Sin embargo, pronto comprendió que estaba en el charco de lágrimas que había derramado cuando medía casi tres metros de estatura. "
SIEMPRE ME HA GUSTADO ESTE CUENTO.
ResponderEliminarUN BESO.
SHERE.
A mi tambien me gustaria haerme pequeñita en ciertas ocasiones.Besitos
ResponderEliminarNo recordaba este trozo. Contado a modo de cuento, es bonito pero la realidad es tan distinta! Que triste es sentir que te ahogas en tus propias lágrimas.
ResponderEliminarUn abrazo Lola.
Cuando nos sentimos pequeñas, lo más insignificante se nos hace inmenso.
ResponderEliminarUn abrazo Lola.
Este cuento siempre me produce inquietud... HAsta cuando vi la película de Disney.
ResponderEliminarLa pobre Alicia va de susto en susto y de cosa extraña en cosa más extraña todavía.
Ahogarse en sus propias lágrims, ufffff
Besotes
Un cuento magistral sin lugar a dudas.Y uno de mis cuentos preferidos.
ResponderEliminarGenial y conseguida imagen del agua.
Un beso-lyria
No pasa nada, siempre puede que haya incluso alguna botella con nuevos remedios que ni siquiera el conejo blanco sabía que existía. Es y ha sido siempre uno de mis cuentos favoritos.
ResponderEliminarUn abrazote extra-grande : )
Me he quedado pensando en Alicia, casi ahogada en un mar de lágrimas. A veces nosotros también nos sentimos "ahogados" por problemas que en realidad no son tan grandes, somos nosotros los que nos hacemos pequeños frente a ellos. Será cuestión de tomar una pócima para crecer y verlos desde arriba, seguro que nos parecerán una nimiedad. No he tenido tiempo para venir a leer tu relato, esta semana la he tenido movidita. Pero vendré, te lo aseguro. Besitos.
ResponderEliminaroo fashiionn...!!
ResponderEliminarme dejaronn de tareaa en la prepaa!!
hacer una reseña sobre el cuento de alicia en el pais de las maravillass
wwiii....!!
ganee!!
genial!!
fuee el mejor trabajoo
claroo tenia que ganarr!!
Es ALICIA EN EL PAIS DE LAS MARAVILLAS!!
saludiitooss!!